Lionel Messi está adoptando plenamente la cultura estadounidense mientras se adapta a la vida en Miami. Fue visto haciendo compras en Publix apenas dos días después de llegar al sur de Florida. El siete veces ganador del Balón de Oro fue visto empujando un carrito lleno de diversos cereales, incluidos Lucky Charms y Fruit Loops, mientras los fanáticos esperaban ansiosos la confirmación oficial de su fichaje por el Inter de Miami.
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Messi aterrizó en Miami el martes con su esposa, Antonela, y sus tres hijos: Thiago, Mateo y Ciro. El astro argentino, que ganará 54 millones de dólares al año, se tomó un tiempo para posar para fotos con los fanáticos al salir de la tienda de comestibles.
A principios de semana, se lo vio disfrutando de una comida familiar en Miami Beach en su primer día en Estados Unidos, donde incluso recibió un beso de un fanático al salir del restaurante. Aunque se esperaba que Messi firmara su contrato y fuera anunciado como jugador de Miami el jueves, el anuncio podría llegar el viernes.
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El copropietario del Inter Miami, David Beckham, también fue visto en el campo de entrenamiento del equipo, con la esperanza de concretar el traspaso de Messi para ayudar a cambiar la suerte del club. Actualmente, el Inter Miami se encuentra en el último lugar de la Conferencia Este de la MLS, a 11 puntos del Chicago Fire por el último puesto en los playoffs.
Messi había expresado su deseo de mudarse a los Estados Unidos después de rechazar ofertas lucrativas de Arabia Saudita y darse cuenta de que no era posible regresar al Barcelona. Su paso por el PSG, donde jugó las dos últimas temporadas, no lo vio integrarse completamente en el equipo, sobre todo después de las críticas de los fanáticos tras su eliminación de la Liga de Campeones.